I. DATOS BIOGRÁFICOS Y ETAPA DE FORMACIÓN Estudió en los conservatorios de Valencia, Madrid y Murcia, titulándose también en Filosofía y Letras por la Universidad Complutense de Madrid. Activista musical, creador de los grupos Actum y Taller de Música Mundana, responsable del Aula de Música de la Universidad Complutense, es defensor de la heterodoxia musical, de las músicas que él llama “otras” y de un quehacer artístico antitecnocrático y liberador. Su espíritu crítico empezó durante su etapa de formación. Algunos de sus profesores, como A. Blanquer, tuvieron un determinado peso en su formación, al menos en el sentido de disciplina. También lo tuvo José Báguena, por entonces desvinculado del Conservatorio de Valencia, del que recibió enseñanzas de composición. Por su parte, Francisco Llácer le ofreció apoyo moral asistiendo a las primeras apariciones de Barber en público, aunque ni estética ni técnicamente existió magisterio efectivo sobre Barber. En Madrid tampoco encontró –dentro del marco del Real Conservatorio– al maestro que necesitaba, concluyendo sus estudios en Murcia. Durante su etapa valenciana, en la década de 1960, Barber se preocupó por leer todo lo concerniente a la música del momento. Publicaciones en la prensa madrileña y catalana le hacen un conocedor teórico de los principales nombres de la Generación del 51. A fines de la década de 1960 acudió a Darmstadt, donde conoció a Tomás Marco, Eduardo Polonio y otros compositores españoles y extranjeros. En 1970, en un concierto Zaj celebrado en Valencia, recibió una fuerte impresión; se entrevistó con J. Hidalgo y le empezaron a llegar mensajes Zaj a su casa. La lectura de Silence, de Cage, o Bruits, de J. Attali, por citar dos ensayos de gran impacto en su formación, pusieron a punto su vertiente de intelectual crítico y propiciaron la redacción de diversos trabajos revulsivos. Siguiendo con los maestros, o más exactamente con las personas que de alguna manera se relacionan con el joven compositor, hay que destacar el reencuentro con J. Hidalgo en Madrid. No se establecieron lazos oficiales de relación docente, pero J. Hidalgo aceptó comentar alguna obra de Barber.